viernes, 15 de octubre de 2010

FÉ DE ERRATAS

Aquí , aquí abajo...


¡Una moneda de 5 para un bocadillo de 50!


Me acostumbro cada vez más a tu trazo,


a tu súbita impaciencia;


zapatos feos,


zapatos feos.


En la pared han pintado un corazón

que parece un anacardo.


Quisiera salir de aquí,

escapar de todos mis parásitos,


de todas mis respuestas,


bonita falda,


bonito peinado.


Aquí, aquí abajo,


jamás aprenderé a pedir disculpas 


por lo que no recuerdo;


jamás pronunciaré los nombres

de todos los que me odiaron

o a los que odié,


no por falta de ganas,


sino por ellas...


bonito pantalón,


calcetines azules,

azules,

azules.


Sin puerta frente a la que ver jugar a los niños,


sin zaguán donde esconderme para tocarme,


sólo deseo cerrarme los ojos a noches

y encadenar mi pecho al sonido de ese tráfico,


de ese....


Para parar el tiempo

no es necesario arrojar relojes por encima de los hombros,


ni refugiar la cabeza detrás de un adoquín

infestado de moscas invisibles.


¡Reclamo este pedazo de tierra!,


orinaré sobre él si es necesario,


me quedaré a vivir sobre él

aunque me vaya la vida en ello...


parecemos fichas de algún juego de mesa

esparcidas con desgana sobre la alfombra.


Tú, mendigas en la acera medio borracho

y yo, me distraigo aburrido en mi ocio,


jugando a imaginarme en tu cabeza,


y es injusto,

mucho ...


pero yo no me he posicionado,


tú no te has posicionado,


nos han posicionado

y es lo que hay.

No hay comentarios:

Publicar un comentario